El jardín de infancia intercultural se basa en la pedagogía Waldorf de Rudolf Steiner. Niños de todo el mundo aprenden a relacionarse en tolerancia con los demás. El aprendizaje se realiza mediante encuentros activos en los que todos los niños participan. La variedad cultural y religiosa enriquece el día a día. Crea las premisas para el entendimiento mutuo, el respeto y la atención, y sienta las bases para un encuentro intercultural satisfactorio.
Creciendo y aprendiendo juntos.
En el caso de niños multilingües es especialmente importante fomentar el desarrollo del habla. Esto se realiza cantando y recitando rimas y poemas de un amplio repertorio de canciones y textos de todo el mundo. Los niños desarrollan sus conocimientos del alemán repitiendo sus versos, jugando y cantando juntos. Jugando, los niños experimentan y conocen el mundo. Todas estas experiencias forman el fundamento para el posterior aprendizaje en la escuela. En las reuniones de padres y entrevistas individuales, los padres tienen la posibilidad de conocer de cerca el trabajo de los pedagogos Waldorf y reciben impulso e ideas para la educación de sus hijos.